The Condechi Chronicles 4

"Después de haber recuperado mis tan preciados anteojos y de haber explotado en la euforia total, y de sentirme como todo un Mauricio Garcés, y de haberle agradecido 346 veces a Mai por haber sido mi cómplice del día, surgía la cuestión de dónde comeríamos. Ambos entramos en una cálida disertación acerca de cual sería el mejor lugar para acallar a nuestras desnutridas entrañas. Justo acababamos de decidir un lugar cuando escuché el llamado de algún miembro de la civilización:'¡RAS!'. Afortunadamente, no era ningn *fan from hell* quien llamaba mi atenciòn, sino un par (a decir verdad eran dos pares) de amigos de mi preparatoria. Ellos se encontraban acomodados en unos sillones estratègicamente acomodados en la 'cuasi-intemperie'. Debido a la posiciòn tan còmoda que ya todos habìan asumido en los sillones, amablemente me invitaron a tomar un par de tragos con ellos mientras recordàbamos aquellos ayeres cuando asistìamos al Colegio Americano.

"A pesar de que la conversación no tocaba temas de extrema profundidad ni aportaba mucho a la filosofía personal, si era una conversación entretenida ya que nos "pusimos al corriente" los unos a los otros; tanto de nuestras vidas como las de aquellos compañeros ausentes en ese momento. La lista era larga pero sumamente interesante y las preguntas del estilo '...Y, ¿que sucedió con el Bigos?' estaban a la órden del día. En esa conversación me enteré de que Poot se había vuelto un loco cleptómano, y de que a Adam le FASCINABA atar a sus chicas (perversión que núnca hubiera imaginado de este individuo debido a su apariencia tan inocente). A medida que avanzaba la velada, aparecían más y más nombres, acompañadas por historias tan y hasta mucho más fascinantes que la historia anterior.

"Cuando nos acercabamos al final de la lista y, por lo tanto, de las anécdotas, la conversación comenzó a disminuir de tono lentamente. No había nada mas que decir. Al parecer ya habíamos comentado las vidas de la mayoría de las personas que entre todos conocíamos. El punto final se acercaba cuando comenzamos a discutir las vicisitudes del joven Toyberg. Al ver que no había escapatoria para el final de este resumen, recordé que había un individuo que todavía no se mencionaba, y que seguramente todos los presentes tenían alguna información o interés acerca de su vida.

"'Oigan, ¿que pedo con el Chema?'- pregunté con curiosidad. En ese momento, todos murmuraron una expresión de sorpresa al unísono: 'uuuuUUUUUUUYYYYYYyyyyyy!'.
'That´s a MORE interesting question!'-Finalizó con presición Mau de Asturias. La charla había tomado su segundo aire.
'...¿y bien?¿Qué con él?'-volví a preguntar, esta vez de una manera más firme.
'Esteee... pues el Chema está bien.'
'Que bueno, pero ¿a qué se dedica?'
'¡Ah! Pues el Chema se dedica a robar...'
'¡¿¡A ROBAR!?! ¿Así como Danny Ocean?'-Pregunté asombrado
'Pues... mas bien como Bejarano...'

"Entre risas, carcajadas, historias, cerveza y camaradería, la noche terminaba para Mai y para mi. Nos despedimos de todos de la manera más amena y educada, agradecimos los tragos y les deseamos que se la siguieran pasando bien. Ambos nos dirigimos a nuestros respectivos vehiculos y así llegó a su fin un día cargado de emociones fuertes en mi colonia favorita de la ciudad: La Condesa"