Las vacaciones anteriores no las merecía. Sin embargo, se ha presentado una nueva oportunidad para vacacionar y librarse de todo aquel "stress" causado por la no-cotidianeidad de la vida. Y si de "stress" se trata, estos ultimos ocho días me han dado el suficiente. Parte de eso proviene de el ahora terminado ITAMMUN; parte proviene de la escuela; y una G R A N parte proviene de los imprevistos... todo tipo de imprevistos. No entraré en detalles puesto que solo recordar esos imprevistos me llena de una rabia impresionante. Y la verdad, todavia no quiero que mi higado explote en pedacitos.
Ahora que milagrosamente la escuela nos ha otorgado un laaaaaaargo puente (no todas las escuelas recibieron el miercoles Y el viernes como dias de asueto) me dispongo a olvidarme de todas las presiones que puedan dañar mi sistema nervioso. Además, iré a estrenar el departamento que mi tía menos preferida acaba de adquirir en las costas de Guerrero; sin contar el hecho de que la grán mayoría de mis conocidos estarán en esos lares rockeando como si no hubiera mañana. Obviamente planeo unirme a ellos más de una vez. Aunque en esta ocasión no existan pistas de patinaje, ni paredes para escalar, ni casinos semi-legales, estoy seguro que la pasaré bomba. Espero que todo aquel que lea este blog también lo pase así.
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